Y un día Karamanos volvió a emigrar (La Nación)

"El saldo fue positivo", aseguró el jinete, que está de regreso en los Estados Unidos para integrarse en el turf de Maryland, donde se destacó

Por Carlos Delfino
De la Redacción de LA NACION

Horacio Karamanos está corriendo otra vez en los Estados Unidos. En un puñado de días y con un breve descanso de por medio, el jinete volvió a ser protagonista, pero ahora en las pistas del circuito de carreras de Maryland. No hubo posibilidades de que se quedara en la Argentina más tiempo y optó por reinsertarse en una hípica en la que se ganó un lugar hace años sobre la base de triunfos y de récords.
Aquí corrió por última vez el sábado, en Palermo. "Estoy pasando la mejor etapa de mi vida. Me gustaría quedarme, pero sólo sería si me contratara una caballeriza fuerte", reconoció a LA NACION. Eso sucedió cuando vino a reemplazar a Jacinto Herrera, pero la relación con La Quebrada sólo duró unos meses.
"El panorama cambió de golpe para Hernán [Ceriani Cernadas]. Se encontró con menos caballada y no se podía mantener lo pactado. Era lógico. Ahí pensé en volverme, pero surgió la chance de montarle a Rubio B hasta que [Jorge] Ricardo se recuperara de su enfermedad. Y después se lesionó [Mario] Leyes y llegué a un acuerdo con [Isidoro] San Millán. A todos ellos les estoy agradecido", repasa. Para entonces, tampoco tenía tanto apuro en emigrar. "Quería esperar hasta marzo para escaparle al frío. Allá están pasando el invierno más cruel en 50 años", explica, ya con la decisión tomada y los pasajes en la mano.
"Tomé tranquilo este proceso y el saldo fue positivo. Me adapté bien, aunque acá el sistema es diferente. Allá las carreras te van llevando, hay más descanso y el agente te depura montas. Lo que trabajaba un martes en San Isidro no lo hago en Estados Unidos ni en tres meses", diferencia, y aporta otro dato personal: "Allá son pocas las veces que monto un caballo por la mañana; el gimnasio es el mejor complemento".
De aquí en adelante, como sucedió en la mayor parte de la última década, las noticias de Karamanos llegarán desde Laurel Park o Pimlico, principalmente. Hacia allá se fue casi en silencio, después de purgar un par de suspensiones por molestias que prefiere no recordar. "A veces, son demasiados severos con las penas, pero bueno...", señala Horacio. El silencio al final de la frase desnuda que no quiere polemizar. Acaso porque tiene presente su futuro. "Tengo claro que debo aprovechar las oportunidades y hoy hay buena plata allá, pero me tira mi tierra. Sé que voy a volver a correr en la Argentina."

Foto: www.marylandracing.com