Vuelo triunfal de Bat Robin en el Argentina y guapas victorias clásicas de Que Flete y Gomek

Dos favoritos respondieron y uno no fracasó, pero quedó en el debe, en los clásicos que se disputaron el domingo 13 en el hipódromo de Maroñas. Los primeros fueron Bat Robin y Gomek, ganadores del Argentina y el Sisley y el restante Woozer, que cotizado gran favorito terminó segundo en el Stud Progreso ganado por el brasileño Que Flete.


Pero claro, primero lo primero. La gran figura de la tarde fue Bat Robin, que brindó un sensacional show al vencer por diez cuerpos en el destacado registro de 1m 29s 16/100 sin que su jockey Fernando Olivera siquiera lo acaraciara con su fusta. Lo del pupilo de Pedro Hernández fue sencillamente espectacular. Quedó cuarto en la largada, luego fue en busca del puntero Shark al pisar los mil y de allí en más lo acompañó con lujoso andar hasta los 500 finales. Después aceleró y mató. Sacó varios cuerpos de ventaja y galopó a piacere hasta el disco. La carrera por el segundo puesto la ganó Neutro, que llegó una cabeza más temprano que Tiberio. A medio pescuezo de éste, Shark finalizó cuarto.


Por su parte, Gomek extendió su racha victoriosa en el Sisley, no sin antes poner garra y corazón para vencer por medio pescuezo a El Progreso, que hizo el gasto durante todo el recorrido en parciales de 23s 19/100 y 46s 17/100. Al promediar el tiro derecho final, el desenlace se simplificó a un mano a mano, con viento a favor para el tordillo de Yolanda Dávila que cargaba sobre la posición del líder con ínfulas de vencedor. Sin embargo, el tordo del Paraná Guazú se encontró con un abanderado de la rebeldía, que a 100 metros del disco reaccionó y recuperó la punta. Dicha situación se modificó cuando Fabio Guedes frotó la lámpara; pegó de derecha y Gomek entregó el poco resto que traía para lograr así su cuarto éxito consecutivo (segundo clásico) de la temporada. A tres cuerpos y medio, el norteño Mestre Feiticeiro (que debutaba en nuestro medio) completó la trifecta, llegando un largo y medio delante de su coterráneo Rosbife.


El primer momento jerárquico de la programación lo aportó el Stud Progreso, reservado para veloces y a peso por edad. Como quedó establecido, Que Flete logró una victoria que no muchos esperaban, debido a la presencia de Woozer. El pupilo de Ricardo Colombo fue traído de menor a mayor por Gustavo Ariel Duarte. Ingresó último a la recta final y luego fue avanzando paulatinamente por el lado exterior de la pista, para en definitiva ganar cerca (un cuarto de cuerpo) pero bien sobre el preferido de las apuestas. A tan sólo una cabeza quedó Carrar Fitz y un cuerpo y cuarto después culminó Killick, el decidido líder que tuvo el cotejo.


(Fotos: Gentileza Maroñas Entertainment).