(turfdiario.com)
Los hijos del crack argentino Candy Ride siguen dando que hablar en los Estados Unidos. La de anteayer fue una tarde perfecta, pues ganaron los dos clásicos en que participaron. En orden de jerarquía, resultó estupendo el éxito de Misremembered en el Indiana Derby (G2), corrido sobre 1700 metros en la pista de arena normal de Hossier Park y dotado con medio millón de dólares en premios. Pero no debe quitársele mérito a lo hecho por la potranca Ride Me Fast en la cancha de arena de Turf Paradise, donde se alzó con el Sun Devil Stakes (L), con 1200 metros de recorrido y US$ 50.000 en premios.
Lejos estuvo de sorprender lo de Misremembered, el mismo que a mediados de julio último había ganado en Hollywood Park el Swaps Stakes (G2). Tras su fallida incursión en el Pacific Classic (G1), ante los caballos mayores, el alazán volvió por sus fueros. En una pista desconocida y difícil fue valiente para contener en el final la atropellada de Giant Oak (Giant’s Causeway) tras dominar en pleno codo y distanciarse al pisar la recta. Criado y entrenado por el carismático Bob Baffert para la sociedad que integran Natalie J. Baffert y George Jacobs, Misremembered le agregó un plus a su éxito estampando un nuevo récord para la distancia de 1m40s4/5, mejorando la marca anterior de 1m41s que estaba en poder de Alydar’s Rib (Alydar’s Prophecy) desde el 1 de noviembre de 1996.
“No largamos tan bien cómo esperaba, pero pude traerlo relajado en una posición expectante. Es buen caballo y realmente aprecio la oportunidad que se me dio de poder venir a montarlo hasta aquí”, declaró tras la carrera Víctor Espinoza, jockey del ganador. Misremembered suma ahora cuatro triunfos sobre siete presentaciones y premios por 554.760 dólares, campaña a la que hay que anexarle el segundo que alcanzó en el Affirmed Handicap (G3), cuando en junio de esta temporada tuvo su bautismo clásico.
La tarea de Misremembered no le quitó mérito a la de su hermana Ride Me Fast, que se sumó al grupo de ganadores clásicos -ya son nueve- de la primera generación de Candy Ride imponiéndose en el Sun Devil Stakes. También a cargo de Bob Baffert, pero en su caso propiedad de Mike Pegram, la nieta de In Excess derrochó calidad para doblegar en arduo desenlace por apenas un pescuezo a Shakenwithanollive (Suave Prospect), al cabo de 1m8s65/100 para los doce furlongs.
De pelo zaino y criada por Pegram, Ride Me Fast lleva ahora tres éxitos en ocho presentaciones y llegó a los 101.480 dólares en ganancias. Con estos dos triunfos, Candy Ride ascendió al puesto número 45 de la estadística general de padrillos, según lo que publica The Blood-Horse, con 3.600.199 dólares en ganancia en lo que va de la temporada.
En lo que respecta al ordenamiento entre los reproductores de segunda generación en 2009, Candy Ride pasó del sexto al quinto puesto, superando la línea de Lion Heart (Tale of the Cat). En total, los descendientes del crack argentino vencieron en 17 clásicos este año.
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