Los fondistas y las damas ponen en marcha hoy la XXVI edición de la Breeders' Cup

ARCADIA, California (De un enviado especial).-


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California no parece California. Está nublado, fresco. Desde las tribunas de Santa Anita Park cuesta encontrar en el horizonte las muy cercanas Montañas de San Gabriel, esas que forman parte del paisaje bello del principal hipódromo de la zona.
Anda todo el mundo bastante más abrigado que de costumbre. La tradición marca que, bien temprano, una camperita fina no está de más, la misma que desde las 8,30 de la mañana ya se pone insoportable ante la aparición prepotente del sol y, poco a poco, comienza a ser un estorbo. Ni que hablar cuando se va acercando el mediodía: a esa altura, ya dan ganas de tirarla, si no costara plata; claro.


Sin embargo, poco importan las condiciones climáticas, porque si la naturaleza se niega a darle calor a la zona, la fabulosa Breeders’ Cup se encarga de hacerlo por sí misma. Ayer, por ejemplo, la noche en LA se cerró con la tradicional fiesta de bienvenida para participantes y periodistas. En 2009, reivindicándose de lo aburrida que fue el año último, las autoridades cerraron el ESPN Zone en el downtown y todo fue excelente. Casi dos horas de música en vivo, comida y bebida al por mayor, hicieron las delicias de todos y de todas.


La XXVI edición de la serie más famosa de los Estados Unidos tendrá su puntapié inicial esta tarde con el Ladies’ Day, durante el cuál se correrán todas las carreras previstas para las hembras y el Breeders’ Cup Marathon. Además, agregado a la programación, aparece el Las Palmas Handicap (G2-1600 m, césped), donde competirá la argentina Teamgeist, en busca de su primer éxito en el Norte. Sin dudas que el highlight de la tarde será el Ladies’ Classic (G1-1800 m, arena), con 2.000.000 de dólaresen premios, y en el que la ausencia de Zenyatta (Street Cry) -como se sabe, correrá el Classic (G1)- abre ahora un panorama mucho más parejo.


En los papeles, la tordilla Careless Jewel es la candidata de casi todos. Por el promisorio Tapit y Sweet and Careless (Hennessy) sólo perdió en su debut para luego apilar cinco triunfos consecutivos, incluídos el Del Mar Oaks (G2), el Alabama Stakes (G1) y el Cotillion Stakes (G2).


La carrera es brava, pese a la ausencia de Zenyatta. Godolphin Stable pone en la pista una yunta de alta gama. Y aquí llega el dato más importante del día para el turf sudamericano, pues una de las dos representantes de la divisa del Sheikh Mohammed Bin Rashid Al Maktoum es la chilena Cocoa Beach, esa que en 2008 sucumbió ante la campeona de los Moss. Tras aquella gestión lindante con lo brillante, la hija de Doneraile Court ganó el Matriarch Stakes (G1), en Hollywood Park, pero en esta temporada solo festejó en el De La Rose Stakes, el 5 de agosto último en Saratoga.


La opinión de Rick Mettee, asistente de Saeed Bin Suroor, es que Cocoa Beach ha recuperado de mañana su mejor forma y en esa apreciación se basa el aumento en las esperanzas para que la hípica trasandina gane por primera vez en la historia una prueba de la Breeders’ Cup. “En su última carrera (NdelaR: fue tercera en el Lady’s Secret), Richard Migliore -el jockey- creo que ha aprendido de los errores que sufrió aquella tarde. No ha estado bien en lo que va del año, pero sus movimientos más cercanos fueron muy buenos; por eso esperamos una mejor carrera de su parte”.


La compañerita de Cocoa Beach no es otra que Music Note (A.P. Indy), tercera en el Ladies’ Classic de 2008, y que llega entonada con dos triunfos de grupo uno consecutivos: en el Ballerina Handicap (G1) y en el Beldame Stakes (G1); su campaña tremenda incluye otros tres lauros en el máximo nivel (Mother Goose, CCAO y Gazelle), con lo que no es precisamente una tarea titánica el darse cuenta de su categoría.


Rainbow View (Dynaformer), una yegua que tiene a Lord At War en su rama materna, desembarcó en el Norte ganando el E.P. Taylor Stakes (G1) de Woodbine, Canadá, y ahora va por la conquista del Ladies’ Classic. Julien Leparoux se apilará en la pupila de John Gosden, que a los dos años supo imponerse en el Fillies’ Mile (G1), en Royal Ascot. Será su debut en pista sintética, pero por su condición eminentemente pastera no debería tener problemas con el cambio de superficie.


Life if Sweet tiene un pedigree que raja la tierra, ya ganó G1 y tratará de quebrar una serie de cinco presentaciones sin victorias, incluso, midiéndose con los machos en la Hollywood Gold Cup (G1), cuando fue tercera. También proveniente del viejo continente, la inglesa Proviso tratará de mantener su invicto en estas tierras tras llevarse del Polytrack de Keeneland el Spinsters Stakes (G1). Propiedad del Juddmonte Stables, ha sabido correr ante rivales del nivel de la propia Zarkava (Zamindar) y de Goldikova (Anabaa) en sus tierras, por lo que realmente no parecen hacer falta muchas más precisiones sobre sus oportunidades.

(Foto: Careless Jewel)