La versión argentina del Ramírez (La Nación)

Carreras / El Gran Premio José Pedro Ramírez

La fiesta siempre es especial

La carrera máxima de Maroñas tiene a Bien Toi y Flag Copado entre sus candidatos y, por primera vez, una yegua


Por Carlos Delfino

De la Redacción de LA NACION

MONTEVIDEO.- El pronóstico advierte sobre la probabilidad de lluvias para hoy en esta ciudad, pero nadie cree que eso pueda aguar la fiesta en Maroñas, el hipódromo que, con su reapertura en 2003, le devolvió al turf uruguayo una vidriera que había perdido. Luego, claro, no se dejó de trabajar para mantener la posición y ahora se cumple un lustro desde que el Gran Premio José Pedro Ramírez (G 1-2400 m) recuperó el rango más alto.
Ya se habrá ido el sol cuando salgan a la pista los catorce caballos y en poco menos de 2m30s se sabrá cuál fue el más iluminado. La carrera cumbre de este lado del charco está programada para las 20.30 (21.30 hora local) y, como cada año, nadie quiere perdérsela. Tampoco quieren dejar pasar la oportunidad de ver a Pablo Falero, que se apilará en un tordillo que le dio una de las satisfacciones más grandes de 2009: con Bien Toi, obtuvo el Dardo Rocha. Sueña el jinete con lograr, al fin, el clásico, que le fue adverso en esta etapa contemporánea.
No es el único que cruzó el Río de la Plata en busca de la gloria y los casi 90.000 dólares de recompensa al ganador. También llegó Flag Copado, su escolta en la cita suprema del Bosque, y su jockey volverá a ser Eduardo Ortega Pavón. Casi un premio a su ascendente tránsito por las pistas argentinas. Este paraguayo de 24 años siquiera había corrido oficialmente en San Isidro, Palermo o La Plata y Flag Copado, su compañero de aventura esta noche, ya cargaba en su mochila dos éxitos de Grupo 1, uno de ellos el Estrellas Classic. El viaje estuvo lejos de ser uno de aquellos calvarios de los últimos años, en los que la burocracia ganaba por varios cuerpos. En doce horas estuvieron en Maroñas, listos para comenzar el trabajo de aclimatación. Y se los nota muy bien, por cierto.
Hay más por lo cual considerar especial a este Ramírez. Rock Emperatriz, la heroína del Selección, es la primera yegua anotada en este clásico desde que la prueba recuperó su lugar en Barrio Ituzaingó. Volverá a correr Relento, el brasileño que se adjudicó este clásico el año pasado. Sing a Song es el dueño del récord de la distancia. Escolaso falló en el Pellegrini, pero acá se ilusionan con la recuperación. Mr. Edwins, nacido en Firmamento, y Mascherano, propio hermano de Aicega, también llevarán la bandera celeste y blanca. Para entonces, ya se conocerán los ganadores del Ciudad de Montevideo (G 1-2000 m) y el Maroñas (G 2-1000 m), y estarán por ser ensillados los participantes del Pedro Piñeyrúa (G 1-1600 m), las otras atracciones.
"El show va a comenzar", alertan las publicidades. El Ramírez es un evento social, una fecha marcada en el calendario por los amantes del turf, pero también por los que no son hípicos. Desde esta noche, claro, además será un día imborrable para los que se abracen a la copa Diario El País y sean paseados por la pista en carruaje.