En un importante esfuerzo del equipo de Burreros.com estuvimos presentes en la disputa del Gran Premio Latinoamericano, siendo el único medio virtual en marcar presencia en el hipódromo de San Isidro. La ocasión merecía nuestra presencia, dos animales nacidos en nuestro país nos representaban y el viaje valía la pena, además de ser en lo personal el primer latino cubierto en tierras extranjeras.
La carrera tuvo un claro vencedor en el peruano Bradock, un armonioso tordillo que defendiendo los mismos colores que otro tordillo, Deepak en 2008, volvió a dejar al Perú en lo más alto del continente, pero esta vez con el aliciente de lograr el triunfo en un medio tan competitivo como el argentino. Además Perú tuvo fiesta completa porque la yegua de 3 años Private Affair lo escoltó de lejos en brillante producción. En cuanto al ganador habíamos señalado en la previa que era para nosotros junto al chileno Papelón (5º) el represente extranjero con mayores chances de lucirse, pero lo hecho superó nuestras mejores expectativas, vino siguiendo a nuestro Sub Far y en la recta lo pasó de largo y se puso rápido a cubierto de cualquier ataque ganando la carrera mucho antes de llegar al disco. Carlos Trujillo y el compositor Jorge Salas le dieron al stud Myrna y a todo el Perú un éxito que quedará en su mejor historia.
Todo lo contrario sucedió con la hípica argentina, solo el representante de La Plata, (aunque ya ganador en San Isidro) Immaculate tuvo una actuación acorde a las expectativas al arribar 3º. Los caballos nacidos en argentina arribaron juntos del 7º al 10º puesto mientras Life Of Victory fue 13º, la paradoja fue que la mejor colocada fue Lady Pelusa, yegua que defendía a Chile. Caló hondo el golpe en nuestros colegas argentinos que demostraban claramente su preocupación, no solo por esta carrera sino porque se sumó a las derrotas en el último Pellegrini y el último Dardo Rocha. El turf brasilero de brillante presente también tuvo una tarde opaca pero es más fácil argumentar, Send In The Clowns, favorito de la carrera falló al ser 11º aunque recordemos representaba a la Argentina, en este caso es el fallo particular de un solo elemento y ello es más fácil de justificar. En tanto Puro Galope llegó donde debía, 15º ya que no calzaba los puntos necesarios para brillar en esta carrera.
En cuanto a los nuestros, estuvimos con ellos durante buena parte del proceso previo a la carrera, Sub Far estuvo calmo en todo momento y Just One inquieto, ambos fieles a su carácter. Tanto los jockeys y en especial los cuidadores vivieron la previa con nerviosismo y expectativa como era de esperar. Just One sufrió un insólito percance al aflojársele una herradura en el paseo previo, problema que según palabras de Fabio Guedes fue bien solucionado y no influyo en carrera. Justamente en el momento de las acciones, Sub Far pese a largar algo frio fue el encargado de tomar la punta, Gustavo Duarte tomó a mi juicio una correcta decisión al salir a comandar la carrera al ver que nadie iba decidido a hacerlo. Just One en tanto osciló entre el 6º y el 8º lugar siempre siendo el más abierto del lote y viniendo más cerca de lo esperado debido a los lentos parciales. Sub Far manejo la carrera a su antojo con parciales de maroñas que se justificaban en el pasto pesado por la lluvia. Bradock lo vino siguiendo siempre cómodo. Cuando Duarte lo llamó a la acción se encontró con lo que ya sabía, el Subordination no se agarró al pasto y no pudo rematar. Así perdió posiciones hasta arribar 6º a 6 ½ cuerpos, posición de todas formas muy meritoria. En tanto Just One amagó a rematar en plena recta pero Fabio Guedes comprobó que no tenía caballo, en su caso el Asidero no tuvo ningún problema con el pasto, sin embargo se cansó y no respondió en absoluto llegando ultimo a 15 ½ cuerpos. Lo de Sub Far da para ilusionarse, nos quedó a todos la sensación de que en tierra hubiera peleado por el triunfo, la prueba está en que ya fue invitado por Palermo para la fiesta del 1º de Mayo y creemos que es una oportunidad que los allegados al caballo y toda nuestra hípica no debe dejar pasar.
Germán Boiso
foto: gentileza Maroñas
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